Balanceo

Un procedimiento en el que se ajustan los pesos de la llanta y el rin para mantener el equilibrio correcto entre ambos.

Existen dos tipos de balanceo: el estático en el que se colocan pequeños pesos al rin para contrarrestar el desequilibrio; y, el dinámico en el que se tiene en cuenta el peso que debe añadirse a la rueda para mayor estabilidad.

En el balanceo estático o en reposo, el peso del conjunto está distribuido uniformemente en torno al eje de rotación, por tanto, aquel no tiene tendencia alguna a girar sobre su eje por sí mismo. Al montarla sobre su rodamiento, una rueda balanceada estáticamente se mantendrá fija  y se  detiene en cualquier posición.  Si no está balanceada, la parte más pesada girará hacia el punto más bajo de la rueda, lo que se refleja en un bote en cada giro produce un desgaste mayor  en ese punto y  la consecuente vibración.

El balanceo dinámico requiere, además, que el peso del conjunto esté distribuido uniformemente a ambos de la línea de centro de la banda de rodamiento de la llanta.